VEGETARIAN ART
C/ Fernán González, 77
28009 Madrid
info@vegetarianart.com
Tel 91 4097722
La carta de los restaurantes vegetarianos no suele ser especialmente atractiva para los niños. Sin embargo este restaurante apuesta por un público familiar a través de su cuidada decoración con elfos, gnomos, hadas y árboles de rasgos humanos.
A la entrada una fuente de piedra y un enorme y sonriente árbol dan la bienvenida al local. Sus paredes de tonos ocres, su techo verde y el suelo negro ayudan a crear la sensación de encontrarse en un bosque encantado, nombre este por el que se conoce al restaurante más que por el propio “Vegetarian Art”.
Otras virtudes del restaurante para una comida con niños es la prohibición total de fumar y su proximidad al Parque del Retiro, además junto a una zona en la que abundan los columpios y zonas recreativas.
El menú infantil (9 Euros) hace una apuesta no demasiado arriesgada para agradar al paladar de los más pequeños – Spaguettis, Croquetas, tarta de chocolate –
En lo gastronómico, personalmente no es el vegetariano de Madrid que más me gusta, pero es correcto y se deja comer. Su menú incluye opciones para celiacos (alérgicos al gluten), veganos (vegetarianos que no solo rechazan la carne sino cualquier producto del mundo animal como huevos o derivados lácteos) y propuestas para “vegetarianos ocasionales”, entre los cuales me incluyo que no sólo toleramos el uso de huevos y queso, sino que además lo agradecemos.
La opción más sencilla es optar por el menú degustación (13 euros por persona) que incluye arroz vegetariano (algo soso), aros de cebolla, canelón de espinacas (insÃpido), timbal de berenjenas y setas (lo mejor del plato) , quiche de cebolla (agradable) , creps de calabacÃn (sabroso) y lasaña vegetariana (correcta sin más).
Ahora bien, la comida vegetariana tiene la virtud (o el defecto) de no producir el mismo efecto de saciedad del apetito que la comida carnÃvora, por lo que necesitaréis pedir algún plato más para no salir del restaurante con el mismo hambre que entrasteis.
Yo probé unas sabrosas berenjenas a la miel (9 Euros), decepcionantes los saquitos de queso de cabra con calabaza y nueces sobre una cama de salsa dulce (12 euros), pasables aunque no muy originales patatas gratinadas y queso Camembert (10 Euros).
A parte de estos hay un amplio surtido de ensaladas (de 8 a 10 euros).
Los postres, capÃtulo en el cual los restaurantes vegetarianos pueden lucirse, son un tanto decepcionantes. La tarta de chocolate muy sencillita, el yogur nada del otro mundo, la pirámide de chocolate blanco prescindible y su postre estrella “FestÃn Elfico” no es más que un bizcocho relleno de chocolate caliente con una bola de helado.
Para beber, desconozco cual es el maridaje adecuado a este tipo de comida, nosotros optamos por el tinto de la casa ( 9 euros) que es un Ribera del Duero de media crianza (6 meses en barricas de roble), que ofrece una excelente relación calidad-precio. A la vista un profundo rojo picota con tonos granates, en nariz aromas de frutos del bosque y ligeros recuerdos especiados, en boca encuentro ligero, amable y frutal de taninos pulidos y suave y agradable paso de boca.
(Vale, no tengo ni idea de vinos, pero con esta coletilla – o cualquier otra parecida- quedaréis bien para cualquier vino joven o de crianza).