DAR TALIWINT 26
Rue de la Bahia
Riad Zitoun Jdid
Marrakech Medina, Marrakech, Marruecos
e-mail : taliwint@wanadoo.ma
Tel. Home : 00 212 (0) 24 37 78 05
Cell phone : 00 212 (0) 68 04 87 99
Generalmente no soy muy dado a escribir sobre hoteles y alojamientos, pero tras mi estancia en este Riad de Marrakech no he podido evitar la tentación de darlo a conocer y, en mi modesta medida, promocionarlo un poco porque creo que es uno de los sitios más agradables en los que me he alojado durante mis viajes.
Quizá convendría comenzar por puntualizar que en Marrakech hay dos posibilidades de alojamientos: Hoteles y Riads.
La palabra Riad en árabe significa patio, son pequeños alojamientos tradicionales de pocas habitaciones generalmente situados en la Medina en casas restauradas y cuyos muros exteriores no dejan adivinar lo que se esconde en su interior. Este tipo de alojamiento ha proliferado en los últimos años por Marruecos, especialmente en la ciudad de Marrakech. Como entre los hoteles, los hay muy diversos, desde antiguos palacios de un lujo digno de las 1001 noches hasta pensiones de medio pelo.
A la hora de decidiros por un hotel o un Riad, debéis saber que los hoteles fuera de la Medina os permitirán desconectar del bullicio de la ciudad, mientras que los Riads os permitirán sumergiros a fondo en el mismo y, al ser mucho más pequeños, se goza de una atención más personalizada. Cada uno debe optar por lo que prefiere.
Personalmente mi elección fue un Riad y, sinceramente, creo que no hay color entre haber pasado unos días en un impersonal hotel de trecientas o cuatrocientas habitaciones que hubiese olvidado al día siguiente de regresar y haberme alojado en un sitio con un encanto especial que por si solo justifica pasar unos días en la ciudad de Marrakech.
Existen multitud de sitios web en los que podéis reservar habitación en los cientos de riads que se esconden por las callejuelas de la Medina de Marrakech. A mi me asesoró un amigo que había pasado unos días en esta ciudad el pasado año y me recomendó el Riad en el que se había alojado: Dar Taliwint.
En la ciudad de Marrakech hay una numerosa colonia de ciudadanos franceses con vocación hostelera que regentan restaurantes y pequeños riads. Uno de ellos, Dominique, es el propietario de Dar Taliwint.
Se trata de una casa del siglo XVIII que ha sido magníficamente restaurada por artesanos marroquíes situada en una zona relativamente tranquila dentro del corazón de la Medina, pero a sólo diez minutos andando de la Plaza de Djemaa el Fna.
El Riad está distribuido en tres alturas más una terraza azotea. En la planta baja hay una pequeña sala de lectura, un comedor para los desayunos y un fabuloso patio central donde sentarse y gozar de una tranquilidad total después de un paseo por la Medina. En las plantas superiores se distribuyen las cuatro habitaciones. Dos por planta, de un tamaño medio y decoradas al estilo árabe, sin lujos excesivos pero con muy buen gusto. Todas tienen su cuarto de baño completo pintado en colores vivos. Desde la terraza ático se divisan las ruinas del palacio del Badi y los montes del Atlas.
Uno de los encantos de este alojamiento es la posibilidad que te da de relajarte y olvidarte un poco del ajetreo exterior. Es casi de agradecer que las habitaciones no cuenten con televisor.
Con lo que si cuentan, y que supongo será vital en los meses de verano, es con aparatos de aire acondicionado.
Pero sin duda lo más destacable de este alojamiento es el excelente y acogedor trato que se recibe de su propietario, Dominique, y del resto del personal del Riad. Sabe dar una atención personalizada para que te sientas cómodo, pero sin agobiarte. Desde aconsejarte un restaurante de cualquier tipo, reservar mesa en tu nombre, organizar un excursión, buscarte un chofer, consejos sobre que visitar y que no, dónde cambiar dinero, orientarte sobre precios, … En definitiva te hace sentir como su invitado, no como su cliente.
Cómo llegar?
Desde el aeropuerto, lo más sencillo es aceptar los traslados que te ofrece el Riad. Son 15 euros por trayecto y desde el lugar donde te deja el coche te espera y acompaña el propio Dominique hasta la puerta.
Es posible que si eres un duro negociador consigas que un taxi te lleve por 10 euros (de arrancada te pedirán unos 20 euros), en ese caso la dirección que debes darle es Dar Si Said (o Museo de las Artes Marroquíes) al que se accede por la misma calle que a Dar Taliwint. Te dejará en un pequeño parking de la calle Riad Zitoun Jedid y desde allí, a buscar el Riad tu solo.
Hay una opción más económica que es coger el autobús nº 11 hasta la plaza de Djemaa el Fna y desde allí caminar hasta el Riad, lo que puede ser una tarea complicada hasta para el señor TomTomGo.
Personalmente no lo dudaría y aceptaría el traslado de Dar Taliwint, Dominique te está esperando en el parking y te acompaña hasta el Riad. Después con un te con menta en el patio de Riad te ofrece las orientaciones necesarias para orientarte en la ciudad, encontrar el camino de vuelta y te enseña las instalaciones y tu habitación donde te está esperando unos pastelillos marroquíes a modo de bienvenida.
Precio?
Para los precios en los que se mueven los Riads de Marrakech, yo creo que está bien. Son 100 euros por noche la habitación doble con desayuno, todo incluido. Hay riads más lujosos pero que se suben a los 200 euros por noche.
Admite el pago en Dirhans o en euros, en efectivo o con tarjeta.
Desayuno?
Muy completo, café con leche, zumo de naranja recién exprimido, algo de fruta preparada, tortitas, bollería y pan tostado. Imagino que si tienes algún capricho extra y se lo pides puede ofrecertelo.
Situación?
Se encuentra en la parte sur de la Medina muy cerca del Palacio Bahia, del Palacio del Badi y a unos pocos pasos del Museo de artes Marroquíes. Andando te plantas en la Plaza de Djemaa el Fna, el corazón y alma de la ciudad, en unos diez minutos. La calle, muy estrecha, impone un poco al principio, pero es tranquila y segura. Además una vez dentro se respira una tranquilidad absoluta. El único ruido que se oye es la llamada a la oración (a eso de las cinco de la mañana que ya le vale) y algún pájaro cantar.
En conclusión, Dar Taliwint es un oasis de paz entre el ajetreo de una ciudad con un encanto especial. No es un alojamiento de superlujo, no hay piscina, televisión, minibar, ni otros caprichos. En cambio ofrece hospitalidad y excelente trato, cosas que yo agradezco más que toallas bordadas, hilo musical o un spa que nunca suelo utilizar. Os lo recomiendo.
Qué te voy a decir yo que no sepas!!!!! Fui a Dar Taliwint precisamente por tus consejos y volví enamorada de este oasis de paz en medio de la Medina de Marrakech. Es un lugar precioso, sólo de pensar en él me entra morriña. Si no fuese porque no me gustó Marrakech, creo que volvería cada año. Y de Dominique, qué decir!!! qué hombre tan majo, hace que Dar Taliwint se convierta en tu propia casa.
Ya sabes que apuntado queda, aunque por ahora no tenga previsto viajar a Marrakech.