1.- Si queréis cambiar Coronas en España , hay que preavisar al banco unos días antes, no lo dejéis para última hora o no llegaréis a tiempo. Para cambiar en Praga, lo más sencillo es sacar dinero del cajero, sí lleva comisión, pero también os cobrarán por cambiar en bancos o en hoteles una comisión similar.
Para hacer una estimación rápida de precios, calculad 100 coronas = 4 euros.
2.- Es frecuente en Praga que el camarero se quede las vueltas interpretando que es la propina.
Algunos restaurantes incluyen la propina en el precio de la cuenta. Este sobrecoste lo añaden al final por lo que puedes encontrar que tu cuenta ha aumentado un 10 o un 15% sobre lo que habías pensado.
3. – En bares y restaurantes de Praga nada es gratis. No existen las tapas ni aperitivos de cortesía. Si te ofrecen algo te lo cobrarán. Si hay pan en tu mesa te lo cobrarán. Si te ofrecen un aperitivo, un licor o cualquier otra cosa te la cobrarán. Y en ocasiones a precios desorbitados.
4.- En cuanto a las entradas para los monumentos, tanto en el Castillo como en el barrio Judío existen varios sitios donde se pueden adquirir las entradas. Si encontráis mucha cola en alguno de ellos, buscad otro un poco más adelante. Os ahorrará tiempo de espera.
5.- Tened en cuenta que en los principales lugares de interés de Praga se paga una entrada extra por fotografiar. La verdad es que no son muy estrictos con ello, por lo que con un poco de caradura se pueden tomar fotos sin pagar, pero para quien le guste tomarse su tiempo, montar el trípode o hacer grandes montajes para sacar una foto, mejor que lo pague para que no le interrumpan en mitad de la faena.
6.- Si tenéis que hacer compras de regalos y souvenirs, un buen lugar es el Mercado Havelska situado en la calle del mismo nombre en el corazón del casco antiguo, a unos 100 metros de la plaza del Wenceslao en dirección hacia la plaza del antiguo ayuntamiento. Se trata de un mercado al aire libre en el que se vende arte, frutas, hortalizas, joyería, juguetes y los recuerdos para turistas que encontraréis por toda la ciudad, pero mucho más baratos que en cualquier otro lugar.
7.- En Praga muchos baños son de pago. Están siempre limpios como la patena eso sí, pero tendrás que pagar entre 10 y 20 coronas por aliviarte sin excepción así que es importante que reserves siempre algo de dinero suelto por si las moscas.
Hay dos modelos, los que tienen un torno que deja paso cuando echas la moneda y los que tiene una cabina en su interior con una señora mayor a la que hay que darle el dinero y que puede dosificarte el jabón o el papel higiénico.
8.- Comprad en algún puesto callejero un bollo de nombre impronunciable, Trdelník . Se trata de una masa de harina enrollada en un pincho de madera (cuyo nombre es trdlo) y que asa al fuego de unas brasas la masa mientras que rota sobre si mismo. La forma final es el de una masa cocida al fuego de forma cilíndrica y hueco en su interior, con ligero sabor ahumado así como aromatizado con canela. Es muy tradicional en los mercados callejeros de Praga y está delicioso. Notaréis el olor a distancia. El mejor que probé no fue en un puesto callejero sino en una pequeña creperie en la calle Nerudova U Kajetana.
9.- Las ciudades con un río como el Moldava tienen el aliciente de que se pueden conocer tanto desde la orilla, como desde el propio río. Existen muchos tipos de recorridos en barco por Praga: desde pequeños paseos para ver la ciudad desde el río, hasta cruceros diurnos y nocturnos con comida o cena con espectáculo. Hay muchas compañías que ofertan estos cruceros y salen de distintos muelles por lo que no es necesario reservar con demasiada antelación. Hay cruceros largos hasta el zoo de Trója, que se encuentra en la parte norte de los suburbios de Praga y algunos llegan hasta el Lago Slapy. Pero la mayoría tienen una duración de 45-60 minutos y son suficientes para darse disfrutar de las principales vistas. Personalmente me gustaron los de la compañía Prague Venice que se realizan en unos pequeños barcos del siglo XIX que, por su tamaño, pueden pasar por los canales más pequeños y os desaconsejo los nocturnos ya que muchos de los monumentos y edificios no están iluminados.
10.- Las líneas de tranvía más útiles para los turistas son la número 22 que sube por Hrad?any facilitando el acceso al Castillo de Praga, al Loreto y al Monasterio Strahov y la número 17 que bordea el rio Moldava desde el barrio judío hasta la ciudad nueva.